Las tres menos cuarto

martes, 20 de enero de 2009

Ninfómana

Sílfide para ser adorada
en el santuario del sexo;
ninfa de metros y plazas
sirena de asfaltos y lechos.
Placer de ira masturbada
a la lumbre del deseo,
a la sombra de sus nalgas
y a la seda de su vello.
Diosa de fe orgasmada
eyacula por su cuello
amor sin docta morada,
sin sabores y sin techos.
En si misma comulgada
como vulva de los cielos;
virgen de misa privada
santa madre del consuelo.
Sólo en ella y por nada
la carne se hace verbo,
la entrepierna se hace agua
y el objeto es placebo.



3 comentarios:

  1. La entrepierna se hace coca cola ja ja ja , si que puede ser un ser fantástico , bonitas imágenes Clau ,besos

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  2. Hola, un poema muy sensual realmente, me encanto pasar por tu blog.

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  3. Hola

    Bella oración, para antes de acostarse.


    Soberbio poema.

    Un beso.

    Gabriel.

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