Las tres menos cuarto

jueves, 17 de febrero de 2011

El efecto esponja





Voy fundiendo glaciares
en cada acto de lo intruso
en cada nudo enrevesado
y en cada trama que perturba.

Voy tras la lágrima invisible
el vicio de sufrir por todo y todos
absorbiendo dudas imprecisas.

Me lleno, me lleno de menesteres
de ánimos que no me incumben
de penas que no controlo
y de aguas saladas calientes.

Más tarde, cuando el fin no hiere,
explosiona mi piel en sarpullido
se desborda la vida por la dermis
y muestro la sonrisa con tirantes.

El efecto esponja de la tarea
me colma tomándome la noche.

Cuando estoy tan llena de pasiones
morir no es verbo de importancia.

3 comentarios:

  1. Precioso poema amiga. Hay que aprender a mantener la distancia de un palmo, para que no se nos derrita el cutis, como poco. Basotes gordos.

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  2. Recibir tus versos con el alma es lo mas bello.. en esta mañana de viernes.

    Un abrazo
    Saludos fraternos..

    Que pases un bello fin de semana..

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  3. Es bonito llegar a la noche lleno como una esponja, ser capaz de absorber todo lo que te rodea, para luego esprimirlo en unas gotas, en unos versos.

    Un abrazo.

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