Yo
hablando conmigo misma,
con las carencias de siempre
las abundancias en suerte
y esa pizarra fría en blanco
que el clarión dejó absurda,
o acaso dejó lesa de muerte.
Sí
callando proposiciones sentidas,
engañando al interlocutor de enfrente;
coraje, coraje de pasiones breves
que se pasan en un instante de agua
de gotitas de negro terciopelo
que anegan los pasos del eres.
hablando conmigo misma,
con las carencias de siempre
las abundancias en suerte
y esa pizarra fría en blanco
que el clarión dejó absurda,
o acaso dejó lesa de muerte.
Sí
callando proposiciones sentidas,
engañando al interlocutor de enfrente;
coraje, coraje de pasiones breves
que se pasan en un instante de agua
de gotitas de negro terciopelo
que anegan los pasos del eres.
Me gusto esa pizarra en blanco de tus versos..
ResponderEliminarExcelente..
Un abrazo
Saludos fraternos..
Hablar con uno mismo es un buen ejercicio y seguro que esa pizarra la puedes reventar dulcemente con tus poemas y recetas je je je . He venido a desayunar, te dejo en la pizarra infinitos besos
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